La Riviera Maya es nuestro destino esta vez, y Maleteando nos vamos a México.
Ha sido un viaje sorpresa en compañía de nuestros amigos Fernando y María Jesús, para celebrar 30 años de amistad y matrimonio, que mejor lugar que la Riviera Maya con sus playas paradisiacas, sus espectaculares Cenotes, y su historia Maya.
Preparativos
Una vez decidido el destino y con muy poco tiempo comenzamos la preparación, enseguida nos dimos cuenta que la Riviera Maya tiene mucho que ofrecer.
Siendo uno de los destinos turísticos por excelencia de Resort y playa, tiene muchos componentes que hacen que sea algo más que eso, con muchas posibilidades de visitas y excursiones para los escasos 7 días que íbamos a estar.
Así que priorizamos lo que creímos más importante, nos decidimos por alquilar un coche 4 días para hacer las visitas por libre, y así huir del encasillamiento de los grupos organizados, ahorrar costes, decidiendo en cada momento que nos apetecía hacer, cosa muy diferente de las excursiones organizadas que te ofrecen y que sale mucho más caro que hacerlo por libre.
Sobre los preparativos de este viaje hay poco que contar, ya que ha sido un viaje casi sorpresa, escogido en el último momento adaptándonos a las ofertas de última hora.
La preparación ha consistido en averiguar los sitios de visita más importantes en la Riviera Maya, eligiendo al final el coche de alquiler, como la mejor opción.
Recorrernos el foro de losviajeros.com, como siempre la mejor ayuda para preparar un viaje y para ponernos al día de una zona que no estaba en mente, pero que desde el primer momento nos sorprendió gratamente por lo que podía ofrecer.
En este caso al ser un paquete que incluye los billetes de avión el hotel con el todo incluido y los traslados aeropuerto-hotel-aeropuerto, sólo teníamos que preparar las visitas y los elementos lógicos, como documentación, cambio de moneda, electricidad contando que es a 110 voltios, que las clavijas son del tipo plano, y los itinerarios.
Eso si todo contra reloj para lo que hacemos normalmente, lo que también le ha dado mayor incertidumbre sobre el resultado final.
Viajando a la Riviera Maya
Salimos desde Madrid desde la Terminal 1, y esto todavía nos facilita más las cosas, al ser una terminal más pequeña y por lo tanto más ágil.
Nos dirigimos a los mostradores de facturación de Wamos con la agradable sorpresa de que no hay nadie y entramos directamente, ya teníamos los asientos reservados, y podíamos facturar hasta 30 kg por lo que esta vez el peso no era uno de los problemas.
Salimos desde Madrid desde la Terminal 1, y esto todavía nos facilita más las cosas, al ser una terminal más pequeña y por lo tanto más ágil.
Nos dirigimos a los mostradores de facturación de Wamos con la agradable sorpresa de que no hay nadie y entramos directamente, ya teníamos los asientos reservados, y podíamos facturar hasta 30 kg por lo que esta vez el peso no era uno de los problemas.
Vuelo
Volamos con Wamos, una compañía exclusiva de chárter al caribe, no tienen más rutas y se puede definir como una low cost para viajes organizados la mayoria a la Riviera Maya.
Por lo tanto los aviones no son de última ni de penúltima generación, por curiosidad comentaré que todavía tienen ceniceros en los asientos así que podéis haceros una idea.
-Los asientos a pesar de ser con sobre coste son malos, tenemos más espacio delante, pero al tener enfrente una pared no puedes estirar los pies, al tener la bandeja y la pantalla que salen del lateral también son más estrechos, por lo que mi recomendación es que no cojáis la fila 18 central, en el modelo que fuimos nosotros.
Aunque como pudimos comprobar no en todos es igual, es mejor otros asientos como la fila 19 o la 20 en los laterales ya que tienen más espacio para las piernas.
Sobre el resto pues contaros que el servicio de entretenimiento no funciona y lo han suplido por una red interna de (wifi sin acceso a Internet),a la que te puedes conectar desde cualquier dispositivo que lleves y tienes acceso a unas cuantas películas no muy actuales, música y unos juegos bastante simplones, pero bueno algo es algo.
La comida es regular tirando a mala, una comida principal con una mini ensalada, un plato de pasta con salsa de tomate de los más simplón, y un trozo de bizcocho, un servicio de café, y 2 horas antes de aterrizar un sándwich de jamón y queso caliente que no estando malo no podía ser más simple.
Sí que hay que decir que la tripulación es súper amable, y te atienden todo lo bien que pueden dentro de sus posibilidades, como anécdota cogieron a un espabilao fumando en el lavabo, y la tripulación le tomó nota del pasaporte, diciéndole que la sanción eran 2000 $, aunque no sabemos cómo acabó el tema.
Llegada a Cancun, Riviera Maya.
Aterrizamos en la Riviera Maya con antelación a lo previsto, y el siguiente paso con las hojas de inmigración y aduanas que te dan en el avión rellenadas a pasar el control de pasaportes.
Muy ágil y bien organizado, con bastantes mostradores abiertos por lo que estuvimos 5 minutos en la cola.
La funcionaria de policía muy amable con las preguntas de rigor sobre estancia y alojamiento, te entregan un resguardo del papel que has rellenado y te advierten que no lo pierdas ya que es necesario para la salida del país (si lo pierdes prepara 25 Euros).
Recogemos las maletas también bastante rápido, y pasas la aduana, para eso entregas el otro papel que te dan te preguntan si llevas tabaco y te hacen apretar un botón, si se enciende la luz verde que fue nuestro caso sales directamente, si se enciende la luz roja, pasas a revisión del equipaje (esto parece aleatorio).
Una vez en el vestíbulo miramos el cambio ya que pasas por delante de una casa de cambio, y no era malo “era de atraco”, el oficial estaba a 22,3 y te daban 17,5, así que ni nos paramos directos donde te esperan los tour operadores y al autocar para nuestro hotel.
Eso si hay que tomárselo con calma, primero porque aquí toooodo se lo toman con mucha calma, segundo porque Cancun es donde aterrizas, pero luego hay casi 200 kilómetros de costa llena de resort desde Cancun a Tulum.
Aterrizamos en la Riviera Maya con antelación a lo previsto, y el siguiente paso con las hojas de inmigración y aduanas que te dan en el avión rellenadas a pasar el control de pasaportes.
Muy ágil y bien organizado, con bastantes mostradores abiertos por lo que estuvimos 5 minutos en la cola.
La funcionaria de policía muy amable con las preguntas de rigor sobre estancia y alojamiento, te entregan un resguardo del papel que has rellenado y te advierten que no lo pierdas ya que es necesario para la salida del país (si lo pierdes prepara 25 Euros).
Recogemos las maletas también bastante rápido, y pasas la aduana, para eso entregas el otro papel que te dan te preguntan si llevas tabaco y te hacen apretar un botón, si se enciende la luz verde que fue nuestro caso sales directamente, si se enciende la luz roja, pasas a revisión del equipaje (esto parece aleatorio).
Una vez en el vestíbulo miramos el cambio ya que pasas por delante de una casa de cambio, y no era malo “era de atraco”, el oficial estaba a 22,3 y te daban 17,5, así que ni nos paramos directos donde te esperan los tour operadores y al autocar para nuestro hotel.
Eso si hay que tomárselo con calma, primero porque aquí toooodo se lo toman con mucha calma, segundo porque Cancun es donde aterrizas, pero luego hay casi 200 kilómetros de costa llena de resort desde Cancun a Tulum.
Llegada al Hotel
En el camino te citan para el día siguiente la charla de rigor y venderte las excursiones que organizan, y de paso meterte todo el miedo del mundo mundial para que prácticamente no salgas del hotel si no es con una excursión contratada con ellos.
Nos dijeron que el país es inseguro, que hay tiroteos “balaseras” en cualquier sitio, que todo el mundo va a intentar engañarte, etc. Cosa no muy normal en una zona tan turistica como es la Riviera Maya.
Ya iremos viendo cómo se desarrollan los días, pero no es esa la impresión que traemos, a ver la que nos llevamos.
Llegamos al hotel, un impresionante resort, que nos recibe lloviendo como si tirasen el agua a cubos.
En la recepción muy atentos pero el trámite es larguísimo, estuvimos casi media hora hasta tener todo zanjado, comprueban los pasaportes, te asignan la habitación, te facilitan las claves de la caja fuerte, del wifi, te dan un mapa para no perderte dentro del complejo, pagas una ecotasa de 20 pesos por habitación y noche, cambias algo de dinero, a un cambio bastante decente, 20,5 pesos Euro, lo que comparado con el aeropuerto estaba muy bien, en fin un montón de trámites que te tienen casi media hora.
Lo siguiente es llevarte a tú habitación en una especie de carrito de golf eléctrico, el problema es que caía agua a mares, y con carrito y todo nos íbamos a poner chorreando así que nos fuimos a cenar a ver si escampaba, esa noche era la temática de México, y el bufé estaba decorado estilo del país con banderas sombreros y ponchos.
El bufé enorme variado y espectacular, la verdad que nos sorprendió gratamente, la bebida te la sirven en la mesa, muy atentos, aunque no había mucha gente, y al ser todo incluido sin problemas.
Una vez cenados y viendo que ya no llovía nos llevaron en el carrito hasta la habitación.
Como seguía lloviendo decidimos dar por terminado el día y descansar lo que pudiéramos y nos dejase el jet lag que con 7 horas de diferencia es importante y ya al día siguiente recorreríamos el hotel.
Conducir en México
Aprovechamos para contaros algunas de las peculiaridades que os encontrareis, si como nosotros os decidís alquilar un vehículo para hacer las visitas por libre.
Nosotros nos alojamos en el Gran Sirenis, cerca de Akumal, a mitad de camino entre Puerto del Carmen y Tulum, es un lugar céntrico dentro de la zona hotelera de la Riviera Maya, pero así y todo las distancias no son pequeñas.
Desde nuestro hotel hasta Chichen Itza, hay casi 200 Km., Cobá está más cerca unos 90 Km., y Cancun lo teníamos a unos 100 Km.
Lógicamente eso es la mitad del recorrido, hay que sumar el regreso, y los desvíos para ver otros lugares, así que si el coche de alquiler es vuestra elección debéis de conocer algunas peculiaridades de la forma de conducir.
Se circula por encima del límite de velocidad por sistema, es decir los 80 km/h a los que están limitados muchos tramos no los respetan ni camiones ni autocares.
Las líneas continuas y la prohibición de adelantar es optativo, la gente adelanta en cualquier lado con o sin línea continua, si que es verdad que normalmente el «adelantado», favorece la maniobra arrimándose a la derecha para que el otro vehículo no invada completamente el carril contrario.
Y que decir de los turismos y las van que recogen o dejan pasaje en cualquier lugar, y por lo tanto se incorporan o frenan sin mucho miramiento.
Otro punto y aparte merecen los resaltes en la carretera ubicados en poblaciones y en lugares que hay que reducir la velocidad como los controles de policía que vas encontrando.
En la mayoría de las ocasiones no hay policías pero tienes que reducir la velocidad, y ya lo creo que la reduces, en los controles y en cualquier otro sitio ya que hay resaltos que son verdaderas barbaridades, tienes que parar el coche para pasarlos y parecen más obstáculos de moto de trial que un resalto en una autovía.
Puedes encontrar estos «Reductores de Velocidad» en cualquier sitio, carretera, autovía etc., eso si están señalizados.
Otra peculiaridad es que no hay pasos a nivel así que cada 1 o 2 kilómetros dependiendo de las circunstancias hay un cambio de sentido que se realiza por la izquierda y están señalizados como RETORNO.
Es la manera de pasar al otro lado de la autovía, una vez pasas el lugar donde te diriges, buscas el próximo RETORNO haces el cambio de sentido hasta el lugar que quieres ir, también es normal giros a la izquierda en la autovía.
Hay muchos controles de Policía, ubicados en puntos estratégicos, cruces de carreteras y entradas a poblaciones.
A nosotros no nos pararon en ninguno, ni tuvimos tropiezo alguno, por lo que la opción del coche de alquiler nos parece la mejor para realizar las visitas en la Riviera Maya.
El Sargazo en la Riviera Maya
La acumulación de algas conocido como el sargazo que sucede en la Riviera Maya está motivado por una especie de alga marina de tipo planctónica que aparece por temporadas en aguas caribeñas.
Aunque es totalmente inofensiva para los humanos, es muy molesta por su olor y por la gran cantidad, que dificulta el acceso y disfrute de las playas.
Cuando hay Sargazo?
El sargazo comienza a afectar a la Riviera Maya a partir del mes de abril, con las temperaturas más cálidas de primavera, y está presente en las playas hasta finales de septiembre.
Hay una Red de Monitoreo del Sargazo en Facebook, desde la que se puede comprobar el estado de las playas.
Donde hay menos Sargazo?
Las playas más afectadas por el Sargazo, suelen estar en la zona de Tulum y Playa del Carmen.
Cacun suele estar menos afectado, pero esto dependen de muchos factores, como la orientación de cada playa los vientos y el oleaje.
Por lo que una playa puede estar llena de Sargazo, y a unos kilómetros encontrar otra que si no está libre, si tiene poca cantidad de algas.
Nuestra experiencia es que en las playas donde se acumula gran cantidad de Sargazo el agua pierde el color verde esmeralda para volverse de un verde marronoso que te hace pensarte el entrar en el agua.
Se acumulan en la orilla en tal cantidad que es difícil sortearlas para entrar en el agua.
Lo peor de todo es el olor desagradable que se produce por la descomposición de las algas y que en algunos lugares se vuelve insoportable.
En nuestra visita a Isla mujeres comprobamos que ninguna playa se libra del sargazo.
Encontramos una parte de la playa impracticable otra medio sucia y otra bastante limpia, eso si el olor estaba en todos lados.
Viaje a la Riviera Maya.
Desde las tarjetas podéis visitar las entradas dedicadas a cada lugar que visitamos en nuestro viaje a la Riviera Maya.
